Punt de Referència reivindica el valor social de los adolescentes que migran solos a Cataluña
A raíz del reparto de adolescentes que han migrado solos por el territorio español, Punt de Referència denuncia los discursos de odio y de extrema derecha que se están generando alrededor de este colectivo. Defendemos que la juventud que llega a nuestro país huyendo de la pobreza, las guerras o las persecuciones lo hace para ejercer derechos humanos tan fundamentales como el derecho a la vida, a un hogar, a la educación o al trabajo. Su llegada es una fuente de enriquecimiento para el tejido social y cultural.
En este sentido, denunciamos las condiciones en las que se está llevando a cabo el reparto de adolescentes migrantes solos, ya que incumple el artículo 13 de la Declaración de los Derechos Humanos, que recoge que “toda persona tiene derecho a circular libremente y a elegir su residencia dentro del territorio de un Estado”. Por lo tanto, estos jóvenes deben poder elegir dónde vivir. Así, reivindicamos:
-
Es necesario un trato más humano y respetuoso, que no se reduzca a simples cifras. Lamentamos profundamente la tendencia a cuantificar a estos jóvenes mediante datos numéricos, olvidando que estamos hablando de personas en situación de protección institucional.
-
Queremos destacar que Cataluña es una sociedad de gran riqueza gracias a la aportación de este colectivo a la sociedad. Los adolescentes que han migrado solos aportan una diversidad cultural significativa que enriquece el tejido social y cultural. Además, su presencia y participación en la educación y en el mercado laboral contribuyen al dinamismo económico del país.
-
Denunciamos que algunas partes del territorio español no estén cumpliendo con su responsabilidad de acogida. Desde Punt de Referència queremos tejer alianzas y acompañar en la formación a todas las entidades del Estado español que inicien procesos de acompañamiento con este colectivo.
Finalmente, reclamamos que la sociedad debe hacer un cambio de mirada y apostar por la inclusión. Así lo destaca la directora de Punt de Referència, Rita Grané:
“En los ojos del racismo, una persona migrante siempre será una persona migrante. Debemos ver a estos jóvenes por lo que son: adolescentes y niños que forman parte de nuestra sociedad”.