Fechas especiales y el deseo de volver a casa

En las calles de ciudades y pueblos ya cuelgan las luces de Navidad. Hay quien ya a salido a la montaña a buscar el tió y las tiendas y los centros comerciales han sido invadidas por un color que ilusiona y acapara a partes iguales. Los calendarios familiares se han activado y decenas de miles de personas hacen planes para los últimos días de diciembre y los primeros de enero. Aún y así, decenas de miles de personas tienen otras fechas señaladas para celebrar, para encontrarse, per hacer y recibir regalos. Entre ellas encontramos el Eid, una festividad que se celebra dos veces al año en diferentes fechas según cuando toque el Ramadán, separadas entre ellas por dos meses y diez días.

La primera fecha del Eid es una tradición musulmana que se celebra cuando acaba el Ramadan y que consiste a encontrarse con la familia durante tres días festivos y se hacen diferentes actividades a pueblos y vilas con la canalla. La segunda fecha, pasados dos meses y diez días, consiste en grandes celebraciones con la familia en las cuales se come carne, lo que nosotros conocemos como la fiesta del cordero. Socialmente, las dos fechas suponen un importante reencuentro familiar, hecho que implica muchos retornos al país de origen de personas que han migrado. Las nuevas tecnologías, pero, han facilitado que en caso de no poder viajar, por la situación burocrática, económica o de pandemia, se puedan dar largas videollamadas para celebrar estas fechas desde la distancia.

 

 

Este mes de diciembre hemos querido hablar de volver a casa, sea por el Eid o por Navidad, volver a casa es siempre un momento importante, tierno y difícil a la vez. Este año, pero, ha sido el primero que muchos de los jóvenes que migraron solos hacia el 2018, han podido reunir las condiciones necesarias para visitar la familia después de tantos años. Como han sido estos viajes?

 

Said nació en Larache, Marruecos, es el pequeño de cuatro hermanos y llegó en el estado Español el 2018 cuando tenía 16 años. Un mes después, habiendo pasado por un centro de menores en Arcos de la Frontera, se traslada en Cataluña y entra a vivir en un centro de Martorell. El año 2019 acabó los estudios de limpieza y ahora, con 20 años, vive en un piso de Santa Coloma.

 

 

Tres años después de llegar a Cataluña, el pasado mes de junio, pudo visitar a su familia al país de origen. “Ha ido muy bien”, dice Said, “pero la vuelta aquí otra vez es muy difícil, me habría quedado más días, pero sólo tenía un mes de vacaciones”. Said explica que fue allí de sorpresa, y que cuando su madre lo vio, no entendía  nada y empezó a llorar. Han sido tres años sin ver la familia, pero han seguido en contacto de forma constante, Said explica que todos ellos estuvieron muy contentos cuando consiguió los papeles. «Les explico que la vida aquí no es fácil, yo no he podido ir antes porque tenía los papeles caducados, después no tenía dinero y ahora me toca esperar tener vacaciones”.

 

 

“Yo siempre les dije que quería irme de Marruecos”, dice Zineb, “a mi me gusta explicarlo todo a mi familia, pero si no les hubiese parecido bien, lo habría hecho igual”. Zineb acaba de cumplir los 18 años y vive con una señora en el Guinardó, estudia para ser camarera y también hacía clases de catalán y batucada. El año 2019 se fue a Melilla desde Nador, la ciudad donde vivía, y entró en un centro de menores. Después de conseguir la residencia voló hacia Madrid y de allí a Barcelona.

Zineb prepara su viaje a Marruecos, donde volará el día 16 de diciembre. Viajará con Anna, “este viaje es un regalo de Anna, una amiga y una hermana que tengo desde que nos conocimos en Melilla”, explica. Viajaran hasta Fez, donde su madre vendrá a verla y de allí irán hacia a Nador a ver a su padre, sus cuatro hermanas y su hermano, todos mayores que ella, también quiere visitar sus sobrinos. “Estoy un poco nerviosa, pero tengo muchas ganas de ver a mi madre”, dice Zineb, que no había podido visitar la familia antes porque no tenía papeles y era menor de edad.

 

Adama llegó a Tarifa después de un largo trayecto desde Sokono, Senegal, de donde salió a principios de 2017. Doce meses después, durante los cuales no pudo tener contacto con sus padres, hizo una llamada que sorprendió a toda la familia. Al llegar a Cataluña vivió en un centro en el Paral·lelo de Barcelona hasta que va obtuvo una plaza en un piso para jóvenes en Santa Coloma. En acabar sus estudios de electricidad y fontanería encontró trabajo de mantenimiento en una residencia de gente mayor en Horta.

El pasado mes de agosto pudo viajar a Sokono, su pueblo de origen, en el sur de Dakar y al norte de Casamance. En el pueblo viven sus padres con sus tres hermanos pequeños. “El viaje ha pasado muy deprisa, pero ha sido muy divertido y me ha hecho muy feliz”. Cuando su familia le pregunta por Europa, Adama tiene claro que no quiere que sus hermanos pasen por lo que él ha tenido que pasar. Aún y así, él es el hermano mayor y asegura que eso es una gran responsabilidad «tengo que ayudar”, diu.

 

foto: Adama en el lago Barakudas, este verano.

 

 

Los tres coinciden en la intención de visitar la familia una vez al año, a Said y Adama les gustaría que fuese en Eid, aunque saben que no es fácil. “Hay que mirar los billetes con tiempo para que sean baratos», dice Adama,  “cuando no tienes trabajo, no tienes dinero para ir, y cuando tienes no tienes los días, es difícil encontrar el momento”, añade Said.

 

La pandemia, factor de distanciamiento de las familias

Tanto para Adama como Said y Zineb, la pandemia ha hecho que tardasen aún más tiempo en reencontrarse con sus familias. Generalmente, la crisis sanitaria ha frenado los procesos de regularización y también ha supuesto dificultades en la búsqueda de trabajo, necesaria para poder costear el viaje en cuestión. En el caso de Zineb, pero, la Covid-19 supuso el cierre de fronteras entre el Estado Español y Marruecos por vía terrestre, que provocó el cierre de Beni Enzar, el paso entre Nador y Melilla. A pesar de la dificultad de entrar en el Estado Español, los ciudadanos y ciudadanas residentes en Nador pueden acceder a la ciudad de Melilla durante el día, sin permiso de pernoctar. Es por eso que, de vez en cuando, Zineb recibía visitas de su madre mientras ella estaba en Melilla, el cierre, pero, las separó desde marzo de 2020.

Adama preveía visitar la familia el any 2019, pero justo consiguió un trabajo y tuvo que posponerlo. Meses después, la pandemia acabó con la posibilidad de viajar al Senegal. A finales de julio de 2021, justamente por el Eid, lo volvió a intentar, pero días antes se contagió de Covid-19 y tuvo que dejar el viaje hasta acabar la cuarentena. 

 

Referentes, primer proyecto en obtener el sello de calidad MC+

Desde su fundación el 2012, la misión de la Coordinadora de Mentoría Social ha sido trabajar para la promoción de la mentoría de calidad en el ámbito de la acción social. Una de las herramientas que hemos creado para hacerlo, y en el diseño de la cual el equipo de Punt de Referència hemos participado, ha sido la creación del Sello de la Mentoría de calidad.

Hace unos días que este proceso ha culminado con la concesión de los primeros Sellos de calidad, fruto de un proceso de evaluación muy completo que podéis consultar en este enlace.

El proyecto Referentes de Punt de Referència ha obtenido el sello MC+, la valoración más alta en la calidad de la mentoría.  En el caso del proyecto Referentes realizamos la auditoría de calidad el curso 2018-2019, pero el proceso de certificación, que se presentó públicamente en diciembre 2019, quedó interrumpido por la pandemia. Este mes de noviembre el Comité ha aprobado los primeros sellos, y finalmente podemos celebrar este momento tan relevante. Los últimos meses, proyectos de mentoría de otras entidades han sido evaluados, estos son los resultados.

Queremos compartir este reconocimiento con el equipo técnico del proyecto que participó tanto en el piloto de la evaluación com en la auditoría final: Núria Martínez, Cristina Ruano y Bàrbara Bort, con el acompañamiento y coordinación pedagógica de Laura Terradas,  han hecho un trabajo intenso y riguroso para garantizar la calidad de todo el proceso de la mentoría.

 

El valor del sello de calidad

Incorporar los sellos de calidad en la mentoría permite conseguir tres objetivos:

  • establecer unos mínimos de calidad exigibles en los proyectos de mentoría.
  • conocer en qué punto de la escala de calidad se encuentra cada proyecto y concretar en qué aspectos se pueden mejorar.
  • otorgar un reconocimiento al rigor de los proyectos que trabajan de la mejor manera posible para acompañar a colectivos vulnerables.

Los sellos MC y MC+ certifican la calidad en dos niveles: el sello MC acredita los estándares mínimos de calidad, y MC+ un nivel de calidad superior.

Los sellos surgen de un trabajo de sistematización de los estándares de calidad internacionales, validados científicamente y el método para evaluar cada proyecto ha sido una auditoría que tenía en cuenta 10 requisitos por cada fase de los proyectos de mentoría (selección de participantes, formación, asignaciones de parejas de mentoría, seguimiento y evaluación). Además, se han realizado una revisión documental y entrevistas a personal técnico y personas mentoras y mentoradas que participaban en el proyecto.

La apuesta por la contratación y por la regularización es radicalmente transformadora

Ya hace años que la acogida de personas migradas está en el centro de muchas entidades sociales y del tercer sector. Aún y así, la urgencia y la necesidad acostumbran a centrar los esfuerzos en vías más asistenciales com son el techo y un mínimo sustento económico. A veces nos falta un espacio de reflexión sobre la construcción de futuros a largo plazo, entre otras cosas, en materia de trabajo y salidas laborales. Un día, en una charla en Girona, una persona del público preguntó a Younes cuál era su sueño. “Mi sueño? Tengo tres salidas: la hostelería, la jardinería y la electricidad, a mi solo se me permite soñar hasta aquí”, respondió dejando la sala muda. Younes tenía razón, su planificación iba a remolque de lo que el sistema le ofrece.

La urgencia y la necesidad de un trabajo a menudo hacen que a los chicos y chicas les falte poder pensar en la construcción de su futuro a largo plazo, el mismo futuro que le queda por delante a cualquier joven de 18 años. La presión por poder sostenerse y emanciparse aprieta, pero la sociedad ha de tener un cierta responsabilidad a la hora de poner en valor sus competencias y romper con la falta de oportunidades, la presión por encontrar un trabajo y a la vez la ampliación de decisiones que les permitan descubrir qué quieren hacer o qué se les da bien. Con todo, a medida que muchos jóvenes avancen en la construcción de su camino, después de haber saltado y esquivado decenas de muros, encuentran uno de nuevo, la inserción laboral.

Alguno jóvenes han querido mostrar los resultados de sus esfuerzos y compartir inquietudes y ganas de continuar aprendiendo. Hoy os presentamos a Rachid, Fadwa, Ismail, Farah y otros jóvenes vinculados a Punt de Referència que necesitan oportunidades laborales para continuar creciendo y construyendo mientras siguen formándose.

 

Las competencias adquiridas a nivel de formación reglada son importantes y suponen, no sólo un aprendizaje curricular sino también uno de social y colectivo. Además, los y las jóvenes aportan una serie de conocimientos y aptitudes que van mucho más allá de su currículum: el aprendizaje de uno y dos idiomas, las herramientas adquiridas y tantas competencias por descubrir. Los procesos de construcción de futuro de los y los jóvenes no pasa solo por encontrar trabajo. A la vez, es un pilar importante para la emancipación, la autonomía y a menudo la autoestima. La red y el entorno adulto de los jóvenes tiene un papel muy importante en la construcción de sus futuros.

A todo esto, cuándo y cómo asumiremos responsabilidades? Socialmente, se continúa poniendo la carga de responsabilidad a los propios jóvenes, jóvenes que aprovechan día a día los recursos y puertas que se les abren delante, que dedican horas con educadoras para buscar herramientas formativas, que aprenden pese a las dificultades, pese al idioma, pese a la falta de espacio de estudio… 

Por qué esta gran carga de responsabilidad a los jóvenes? Quizá en algún momento habrá que afrontar la autocrítica desde el tercer sector, desde las cooperativas, desde la economía social y solidaria. Pero sobretodo, desde la sociedad. Hablamos de acogidas de forma constante, y en pocos casos se  hacen con reflexión, planificación y escucha. La contratación, pues, es una de las acciones más contundentes y necesarias y nos tenemos que poner las pilas. Es necesario que empecemos a asumirlo como eje prioritario. Las asociaciones, las cooperativas, el pequeño comercio y las entidades empiecen a organizarse para conocer y dominar las ayudas y apoyos a la contratación y empiecen a contar con personas migradas en los equipos, no solo por tener un sector más diverso, justo e igualitario, sino porque la apuesta por la contratación y por la regularización es radicalmente transformadora.

Sara Montesinos

Mentoría para la inclusión: Premios Innovación Social 2021

Recordad que desde el Área de Formación y Consultoría impulsamos un programa para replicar nuestro modelo de mentoría social de calidad? Gracias a este trabajo hemos podido adaptar nuestra mentoría a las características de diferentes ciudades, comarcas o países, i así, acompañar a la emancipación de más juventud tutelada.

Esta transferencia de conocimiento (que todo seguido os detallamos) ha sido premiada con el Premio a la Innovación Social 2021, de la Fundación la Caixa. El reconocimiento pone en valor el gran esfuerzo de estos años para generar conocimiento colectivo, y tejer complicidades: para nosotras la mejor manera de transformar la sociedad. La entrega de premios va tuvo lugar el día 20 de octubre en Madrid.

Mentoria per a la inclusió

El 2019 la Fundació La Caixa ens va atorgar els recursos econòmics per replicar el model fent partenariat amb l’Associació Quilòmetre Zero de Tarragona. Així és com vàrem crear el projecte Mentoria per a la inclusió, amb l’objectiu de donar un impuls a la mentoria social de qualitat en els programes d’acompanyament al jovent tutelat i extutelat. Conjuntament amb Quilòmetre Zero vàrem dissenyar un nou model de transferència de coneixement, centrat en la metodologia de la mentoria social. Vam adaptar el model a les singularitats territorials de Tarragona i al seu model d’organització i naixia així el projecte “AmbTu”. Durant el procés, l’equip del projecte Referents hem format a l’equip tècnic de Tarragona, i hem acompanyat el disseny i posada en marxa d’aquest nou projecte inspirant en el model del projecte Referents adaptat al territori del Camp de Tarragona.

La Marina Claveria, directora i responsable de projectes de l’Associació Quilòmetre Zero valora que “Rebre acompanyament i suport en la posada en marxa d’un projecte nou és un avantatge que genera confiança i seguretat a nivell professional, institucional i també en relació al voluntariat. Aquests tres elements, imprescindibles per engegar el programa, compten gràcies a aquest suport, amb una garantia afegida d’èxit gràcies a la trajectòria de l’entitat experta”.

Punt de Referència trobem important donar continuïtat a aquest model de transferència de coneixement i també hem impulsat la creació d’un grup de treball estable amb tècniques i tècnics dels projectes de mentoria social dirigits a nois i noies tutelades i extutelades. Creiem que l’intercanvi de bones pràctiques ens ajuda a millorar el model de mentoria de cada entitat. Per aquesta raó aquest grup de treball l’hem volgut vincular a la Coordinadora de Mentoria Social, amb l’objectiu que esdevingui un espai de trobada estable.

El Proyecto Referentes, en plena forma

El Proyecto Referentes fue el embrión de Punt de Referència y fue también, el primer proyecto de mentoría social con juventud juventud extutelada a nivel estatal. Año tras año suma participantes, tanto jóvenes como voluntariado; son incontables las vivencias compartidas en tantas relaciones de mentoría, y son muchos los chicos y chicas que han crecido con una persona adulta al lado, gracias al proyecto.

A lo largo de estos años hemos ido innovando en el diseño del proyecto para adaptarlo a los tiempos, a las necesidades de jóvenes y de voluntariado. Actualmente el éxito de Referentes ha hecho que el interés por el proyecto haya llegado a entidades de otros países, a las cuales formamos con nuestra metodología para que puedan poner en marcha la mentoría social adaptando el Proyecto Referentes a sus necesidades.

  

 

En Punt cada año abrimos nuevos grupos de Referentes; el 2020 se formaron 73 relaciones de mentoría. El 2021 tendremos un total de 5 grupos en marcha, os explicamos en qué fase se encuentra cada uno de ellos: 

  • Fase de búsqueda de voluntariado. 
    Próximamente abriremos dos nuevos grupos (el G49 y el G50) que iniciaran la formación de voluntariado a finales de año y comenzarán las relaciones de mentoría coincidiendo con el año nuevo. Durante el mes de noviembre buscaremos las personas voluntarias interesadas que formaran los nuevos grupos de Referentes.

 

  • Fase de formación de voluntariado y preparación de jóvenes
    Una vez seleccionadas las personas participantes, los y las referentes hacen una formación de 10h previa al inicio de la relación de mentoría. En la formación aprenden aspectos de la realidad de la juventud extutelada y qué se espera de ellos y ellas. Mientras tanto, los jóvenes que quieren participar también han estado viéndose con su educadora para conocer el proyecto y poder expresar el tipo de acompañamiento que creen necesitar. El G48 y M1 (primer grupo de Referentes Mataró) son los grupos que actualmente están formándose y a finales de diciembre iniciaran la fase de asignación de parejas.

 

  • Fase de asignaciones de parejas
    Los y las mentoras ya están preparadas para conocer al chico o chica a quien acompañarán. La educadora del proyecto asigna a cada joven un mentor/a, teniendo en cuenta sus gustos, personalidades, disponibilidad para verse…

 

  • Fase de seguimiento de relaciones de mentoría y acompañamiento a mentores
    Una vez iniciadas las relaciones, se realiza un seguimiento profesional a las parejas con encuentros con la educadora. Juntas revisan qué les está aportando la relación y hacia donde quieren que se dirija este acompañamiento.
    Las personas referentes también se encuentran grupalmente una vez al mes, para compartir sus experiencias y dudas en relación con el acompañamiento a los chicos y chicas. El Grupo G47 se encuentra ahora en esta fase del proceso.

 

  • Fase de cierre y avaluación.
    Ya han pasado 10 meses desde el inicio de los encuentros y llega el momento del cierre. El final del proyecto no significa el final de la relación, sino que las dos personas tienen una relación lo bastante consolidada como para pasar a encontrarse de manera natural, sin nuestra supervisión. Deseamos lo mejor a las relaciones del G46 y G46 que ya han llegado al momento del cierre!

“La patología la estamos generando nosotros”

Educadoras, psicólogas, terapeutas y psiquiatras ponen el foco en las causas coyunturales que afectan la salud mental de la juventud migrada.

Sara Montesinos

El próximo día 10 de octubre se conmemora el Día Mundial de la Salud Mental . Este año, a pesar de la importancia que el benestar emocional tiene a nivel global y transversal en la sociedad, han saltado las alarmas por lo que se refiere a jóvenes. Si bien la Organización Mundial de la Salud (OMS) anunciaba que entre un 10 y un 20% de los adolescentes experimentan trastornos mentales, la mayoría de ellos se manifiestan antes de los 14 años y la pandemia ha agravado de forma exponencial esta situación. El pasado mes de mayo, el Hospital San Juan de Dios de Barcelona aseguraba haber observado un incremento del 47% de pacientes atendidos en urgencias por motivos de salud mental, en comparación con el mismo período de 2020.

Según un estudio del Valle de Hebrón, una cuarta parte de los jóvenes que acuden a urgencias por motivos psiquiátricos se han auto-lesionado y según el Código de Riesgo del Suicidio, el sistema de detección de la Generalidad de Cataluña, los intentos de suicidio en adolescentes han aumentado un 27% desde la pandemia , legando hasta más de 600 casos en jóvenes de hasta a 18 años. Hoy en  día, los  suicidios son la primera causa de muerte no natural entre jóvenes de 16 a 35 años , por encima de los accidentes de tráfico, una alarma social para la que ni las administraciones ni las entidades están preparadas por falta de recursos.

Entre muchas otras cosas, la pandemia y las expectativas de futuro han agravado esta situación entre los y las jóvenes pero, ¿  qué pasa con los que han migrado solos? El  estigma, el trauma y el tratamiento en salud mental y benestar emocional son los motivos por los que en este reportaje hablamos con profesionales y no jóvenes. Más allá de las vivencias, hablamos de un sistema que provoca sufrimiento a las personas hasta el desarrollo de sintomatología o trastorno. Educadoras, psicoterapeutas, psicólogas y psiquiatras hablan de las consecuencias directas del modelo de acogida.

Marina Nadal, Mariona Sementé, Bet Termes y Alicia Garcia son técnicas de Punto de Referencia. Dos de ellas vienen de formación en psicología y acompañan a diferentes jóvenes que tienen vínculo con la entidad. “Ansiedad, depresión y estrés postraumático son las principales situaciones que afrontamos las trabajadoras en centros de menores”, dice Bet, compartiendo la experiencia de su anterior trabajo. Añade, sin embargo, que la falta de personal psicológico en los mismos centros, y en el sistema en general, provoca que haya una muy baja capacidad de diagnosis definitiva y por tanto no hay una buena detección por prevención. 

«Más allá de casos concretos, hay un malestar general», dice Mariona, «hay un malestar emocional porque las condiciones estructurales son las que son, con necesidades básicas no cubiertas y es imposible estar bien en estas situaciones, a nivel de benestar emocional es muy complicado que estos jóvenes se sientan seguros y tranquilos». Marina, que coincide con sus compañeras añade la dificultad de hablar sobre benestar emocional con los chicos y chicas. «Es difícil que pidan ayuda para algo de lo que no son conscientes, no hay conciencia de según qué malestares o necesidades, eso es lo que se enquista posteriormente”.

Mariona explica que existen diferentes factores estresantes constantes que se suman al trayecto migratorio, entre ellos está el no entender el idioma, no tener documentación o la presión que tanto las educadoras como el sistema ejercen sobre ellas y ellos. Alicia enfatiza en la necesidad urgente de resolver los procesos de regularización debido al impacto emocional que supone en los jóvenes y asegura que se han encontrado chicos y chicas con cuadros depresivos, desmotivaciones y otras dificultades, que con la renovación de NIE han supuesto un cambio y una mejora a nivel motivacional y de estabilidad emocional. 

 

Àngels Guiolà es psicoterapeuta infantojuvenil del equipo de Exil , una ONG que trabaja en la atención terapéutica médico-psico-social con personas con diferentes tipos de trauma, entre ellos, el proyecto migratorio. “Nosotras no trabajamos con diagnosis en salud mental, creemos que hay que hacer una valoración comprensiva del dolor de la persona que lega, es importante conocer el histórico del joven”, asegura Àngels. Añade que existen diferentes aspectos a tener en cuenta, entre otros, el paradigma del trauma y el impacto del mismo en la persona, así como el vínculo y ataduras con las figuras primarias en la infancia.

“Nos encontramos con cuadros depresivos, cuadros ansiosos e intentos de auto-lesiones, esto nos da respuestas ya menudo ante un cuadro traumático nos hace falta farmacología. Estamos hablando de personas que han vivido el horror, que han sufrido mucho. Es necesario poder calmar este cerebro”, explica Àngels. Hay síntomas relevantes como los descuidos, no recordar cosas que han pasado o las ausencias y otras respuestas disociativas como los brotes psicóticos, que surgen cuando las personas han sido expuestas a situaciones muy extremadas que hacen que el sistema nervioso se fragmente. Sin embargo, Angels se reafirma en que los diagnósticos con niños son injustos, “hay que ver lo global y comprender qué está pasando para desarrollar estos síntomas o trastornos”, dice.

 

Yolanda Osorio, psiquiatra y coordinadora de ESMESS (Equipo Salud Mental Sin Techo) y  del programa SATMI (atención en salud mental para población migrada), asegura que para muchos jóvenes es muy difícil hablar de salud mental o de enfermedad mental derivada del estigma. 

La experta en salud mental y procesos migratorios abre también la puerta a la reflexión sobre los códigos que se usan en nuestra sociedad  “es difícil hacer diagnosis como tal, los códigos que utilizamos en psiquiatría son códigos anglosajonas y por tanto occidentales que no están adaptados culturalmente ”, y continúa, “hay formas de expresar el malestar que no coinciden con otras personas, árabes, por ejemplo, no existe el concepto de depresión” . Según Yolanda, es muy importante este sesgo cultural y asegura que se han hecho intentos por adaptar los códigos, pero a la vez se demostra la hegemonía del mundo occidental hasta para observar la complejidad de tratamientos y culturas que no casan. «Hay que entender cómo podemos ser respectuosos y cómo poder abordar el malestar en diferentes situaciones», remarca.

También Yolanda coincide con el mismo listado de situaciones con las que se encuentra; trastornos de adaptación, de estrés posttraumático, reacciones y brotes psicóticos que pueden desarrollarse esquizofrénicos. “Hay cuadros ansiosos y depresivos que hacen que los jóvenes estén tristes, sin ganas o también a la defensiva, pero con los trastornos de adaptación, ponemos la etiqueta en sí mismos cuando la tendríamos que poner fuera”.

“Más que de patología, nos gusta hablar de sufrimiento, y éste tiene que ver con las situaciones con las que los jóvenes se encuentran”, explica Yolanda, que recoge momentos de la historia premigratoria, donde encontramos familias muy ricas a nivel afectivo pero también otras muy desestructuradas. Después, está todo el propio proyecto migratorio que puede contener situaciones muy traumáticas. Cuando llegan aquí, después de todo, se encuentran en un centro, en el que no pueden trabajar, sin expectativas y sin futuro. La patología la estamos generando nosotros”.

 

Una acogida real como herramienta de prevención

 

Las técnicas y expertas consultadas coinciden en que la situación social y burocrática de los jóvenes es, en gran medida, la causante de estos efectos en su salud mental. Es por eso que proponen mejoras en el sistema , entre otras, como la reducción de la precarización y rotación de profesionales en los centros de acogida, como dice Alicia, lo que garantizaría un más y mejor trabajo terapéutico con los jóvenes, y añade que es necesaria una perspectiva antirracista para el abordaje profesional de los casos. 

Àngels asegura que hay que apostar por una formación en trauma de las profesionales de los alrededores de los jóvenes para poder acompañar a estos menores desde el paradigma de la resiliencia, además de la necesidad de una red pública que pueda atender a los jóvenes con sus especificidades .

Tanto las técnicas como Yolanda y Àngels coinciden también en la necesidad urgente de facilitar la regularización de papeles , aseguran que la incertidumbre genera mucha impotencia y frustración. «La documentación es la base, todo puede ser posible a partir de aquí», asegura Marina, «es una trampa mortal», añade Àngels.

Yolanda va más allá y asegura que a menudo se pone el foco en la necesidad de más profesionales pero que en realidad debe lucharse por cambios legislativos en relación a la ley de extranjería, el acceso a la vivienda y sobre todo la urgencia de facilitar el permiso de trabajo. “Decimos que somos un país de acogida pero no tenemos herramientas de acceso a la formación ni al trabajo, sostenemos situaciones muy precarias en las que no hay un planteamiento más allá. ¿Cuántos de estos jóvenes llegan a la universidad? Somos nosotros quienes los encasillamos con nuestros prejuicios y no ponemos expectativas, los sostenemos sin invertir en que sean personas que puedan formarse e integrarse”, denuncia Yolanda, “o ponemos el foco aquí o todo es muy complicado” .

El Proyecto Acull gana en sostenibilidad

Celebramos la incorporación de dos nuevas Fundaciones en la red de entidades colaboradoras del proyecto de acogida de juventud migrada: la Fundación Bizcabar que, con el objetivo de dar apoyo a colectivos vulnerables y en riesgo de exclusión, ha otorgado uno de los Premios Bizcabar 2021 al Proyecto Acull, y la Fundación CMJ Godó que ha renovado su compromiso con los chicos y chicas de la entidad.

Sus aportaciones se suman a las colaboraciones estables de la Fundación Torres, del Ayuntamiento de Barcelona y de la Generalitat de Catalunya. Gracias a esta red de apoyo, este mes empezarán dos nuevas relaciones de acogida, que se suman a las 3 que actualmente ya están en funcionamiento.  A la vez, estamos finalizando el proceso de selección y formación de 2 nuevas casas acogedoras para iniciar la acogida el último trimestre del año. Esta buena noticia nos permite cerrar el 2021 e iniciar el 2022 con buenas previsiones para el proyecto y para jóvenes que espera ampliar sus horizontes de futuro gracias a los meses compartidos a las casa del proyecto Acoge.

Como en el resto de proyectos, mantenemos el compromiso de género reservando el 25% de les plazas para chicas.

 

 

El equipo de gestión: quien lo forma y como trabaja?

Si eres voluntaria o joven habrás tenido pocas ocasiones para conocer la parte del equipo de la entidad más invisible: el área de gestión

Una buena gestión de la entidad es el cojín de apoyo para que pueda darse aquello más importante, el acompañamiento a jóvenes y a voluntariado. Por este motivo, hoy tenéis la oportunidad de conocer quienes son y como trabaja este equipo. Está formado por 3 personas: Rita, la directora, Thaïs, la gestora administrativa y Berta, técnica de comunicación.

 

La dirección
Rita asume diversas funciones: representa la entidad a nivel institucional; no se pierde reuniones, actos o formaciones donde Punt de Referència pueda aportar conocimiento o generar sinergias estratégicas.

En nuestra entidad la dirección se encarga, también, de buscar fondos que garanticen la sostenibilidad, presentando Punt de Referència a convocatorias de subvenciones o premios y construyendo vínculos con empresas colaboradoras. Cuenta con el apoyo del resto del equipo de gestión y del grupo de trabajo de captación de fondos, formado por miembros de la Junta.
Per último, dirige el equipo humano profesional y hace de puente entre este y la Junta, llevando de un equipo al otro los temas que se hayan trabajado y ayudando en la toma de decisiones en los dos espacios.

 

La gestión contable y administrativa
Thaïs es la encargada de llevar los números al día, y es quien pone sobre la mesa los resultados económicos de la entidad.
Sus horas de trabajo las dedica a llevar la contabilidad al día,  hacer un seguimiento acurado de la tesorería y de la ejecución del presupuesto anual, los pagos a proveedores y trabajadoras y el seguimiento de los cobros de facturación y cuotas de socias.

Trabaja conjuntamente con la dirección para presentar solicitudes de subvenciones y hacer las correspodientes justificaciones.

 

Comunicación

Berta es quien procura visibilizar la tarea de la entidad y dar a conocer la realidad de la juventud tutelada y extutelada. Entre sus tareas están las de actualizar los contenidos del web, gestionar las redes sociales, redactar noticias e incorporarlas a la newsletter mensual L’Apunt, elaborar material gráfico, fotográfico y audiovisual, redactar y enviar notas de prensa y llevar la voz de jóvenes y del equipo a los medios de comunicación. También participa de la puesta en marcha de las campañas de búsqueda de voluntariado.

 

Ah, y cuando el local reclama un cambio de muebles, colgar unas cortinas o un repaso de pintura, nos ponemos ropa de trabajo y cambiamos el ordenador por los pinceles!

Salimos a la calle para pedir la reforma del Reglamento de Extranjería, ahora parada

«4000 jóvenes extutelados pueden quedar desemparados en Cataluña por el freno de Marlaska» Así titulaba TV3  la noticia en la cual nos oponemos a la decisión del Gobierno de no desarrollar la reforma del Reglamento de Extranjería. El nuevo reglamento estaba previsto que se aprobara este verano, pero ha topado con la negativa del ministerio del Interior. Ante este nuevo revés hacia los jóvenes, hacia el trabajo que hacemos conjuntamente las entidades para que su emancipación sea viable, sólo nos queda salir a la calle.

La concentración

 

   

Se trata de una iniciativa reciente, impulsada por la Coordinadora Obrim Fronteres en colaboración con otras entidades y federaciones entre las que nos encontramos. El objetivo es acelerar la aprobación de la reforma del Reglamento de Extranjería.  Sales a pedir el cambio con nosotros?

Además de asistir a las concentraciones, puedes apoyar la iniciativa sumándote al manifiesto.

 

“Este no es un piso cualquiera”

L’Abdel i en Nama, dos joves membres de Punt de Referència, formen part de La Balma, un projecte d’habitatge cooperatiu de Sostre Cívic.

Sara Montesinos
Fotografia: Berta Roig

 

Una porta de reixa, un intèrfon. Bústies obertes, de fusta, encara sense nom, i un altre intèrfon. L’ascensor encara té cartrons a les parets, fa olor de nou i d’obra. Al quart pis corre l’aire, a la cantonada del passadís, una taula i dues cadires conviden a seure, prendre la fresca i enlluernar-se amb una alternativa comunitària davant l’especulació immobiliària. Espais comuns i galeries comunitàries, una biblioteca, un safareig col·lectiu, el taller, la sala de cures i més idees que encara avui segueixen prenent forma per adaptar-se a les necessitats i desitjos del veïnat de La Balma.

L’Ali està molt contenta, es mira les parets, el passadís, l’ascensor de color verd i les escales de fusta. L’any 2016 va decidir fer un gir radical al seu consum i va cercar alternatives energètiques, telefòniques i alimentàries fins que va descobrir que també hi havia un cooperativisme d’habitatge on podia participar. Així es va sumar al nucli de Sostre Cívic per crear La Balma, un projecte on la participació de totes i cadascuna de les veïnes és imprescindible.

Més de mil sòcies formen part de Sostre Cívic, una cooperativa que s’organitza per projectes d’habitatge cooperatiu arreu del territori i que el passat 2016 va presentar i guanyar un projecte a l’Ajuntament de Barcelona. Així neix La Balma, al barri del Poblenou de Barcelona, un projecte d’habitatge cooperatiu en cessió d’ús per 75 anys. Cinc anys després, l’Ali ja ha posat alguna planteta al seu replà, i somriu. “Moltes de nosaltres ens vam conèixer a la Fira d’Economia Solidària de Catalunya del 2016 en una dinàmica que feia Sostre Cívic”, explica, “som un grup que des del primer moment ens hem agradat i hem anat agafant confiança i aprenent”. Ara, unes setmanes després dels primers trasllats, encara queden veïnes per arribar i molta feina a fer: “hem d’acabar d’imaginar els espais comunitaris, saber quins mobles posem, com ho paguem i cap a on anem, moltes coses importants que ens ajudaran a seguir fent grup”.

 

Un pis per a joves

L’Abdel obre la porta i ensenya el seu pis amb un somriure. Maletes per aquí i per allà resultants d’estar encara aterrant. Als seus 22 anys, la Balma és, aproximadament, el vuitè lloc on s’instal·la.

L’Abdel i el gos de l’Ali (la seva veïna), descansen al quart pis de La Balma

 

L’Abdel va marxar de Nador als 16 anys i des que va arribar a Motril ha passat per diversos llocs com Granada, Amposta o Sant Cugat. “Si m’hagués quedat al Marroc, el meu camí hauria estat molt més difícil. Aquí no és més fàcil, però trobes persones que t’ajuden i te’n surts”, explica. L’Abdel ha viscut en centres de menors, pisos tutelats i també en un pis compartit amb altres joves i el suport de famílies voluntàries a Sant Feliu de Llobregat. Ell ho té clar, ”és una oportunitat molt bona per mi”, diu, “aquest no és un pis qualsevol, amb el veïnat ho compartim tot, si necessites ajuda hi són. A mi no m’agrada deixar passar les oportunitats”. Ara, després d’haver estudiat informàtica i programació, treballa en una empresa industrial i aviat renovarà la residència per segona vegada.

Com l’Abdel, en Nama va marxar del seu país d’origen a causa de la situació econòmica i la previsió d’un futur incert. Ara, amb 22 anys, riu recordant que als 16 es va escapar de Kayes, la ciutat on vivia amb la seva família, a l’oest de Malí, sense avisar els seus pares, per arribar a Europa. “Si els hagués dit que volia venir aquí mai no m’haguessin deixat!”, diu. Un any després, havent recorregut Malí, Algèria i Líbia, va anar a Marroc i va aconseguir saltar la tanca de Melilla. Dos mesos més tard va ser traslladat en avió a Barcelona, d’allà a Vilafranca, Teruel, Hospitalet, Montcada i Reixac, Barcelona i Sant Feliu, on coneix l’Abdel, amb qui traben una molt bona amistat des de llavors. Des de 2016, en Nama treballa de cuiner, una professió que ha anat perfilant amb un PFI i un Grau Mitjà.

“Quan Punt de Referència em va trucar per parlar-me de La Balma em vaig alegrar molt”, recorda en Nama, “era una oportunitat que havia d’aprofitar, hi ha molts nois que s’ho mereixien i em van trucar a mi”. En Nama fa èmfasi en la convivència, assegura que viure en un habitatge cooperatiu és diferent i explica que ja han participat de diverses dinàmiques prèvies per conèixer-se. “Aquí és com si fos una família, i això m’agrada, com més persones coneixes més portes obertes tens al futur”.

 

L’any 2019 s’inicien les primeres converses sobre habitatge cooperatiu a Punt de Referència. Poc després, el 2020, apareix la convocatòria del Projecte Lliures, una iniciativa impulsada per Coop57, Òmnium Cultural i ECAS que treballa per revertir les desigualtats, la pobresa i l’exclusió social oferint suport a projectes arreu del territori. Amb aquest suport, l’entitat aconsegueix les aportacions inicials de capital per assegurar que un dels pisos pogués ser de caràcter social i inclusiu.

“Les condicions per l’Abdel i en Nama són les mateixes que les de la resta de veïnes”, assegura la Rita, directora de Punt de Referència, “l’única diferència és que el capital social inicial s’ha assumit des de Punt de Referència amb l’ajut de diverses subvencions. El que hem fet és facilitar aquest pas gràcies a l’acord dels veïns i veïnes de tenir un pis per la inclusió social”. Així, l’Abdel i en Nama paguen un lloguer de 540€ entre tots dos i tenen la seguretat de poder ser al pis fins que ells mateixos ho decideixin. Amb les seves feines i els seus estalvis, aniran retornant a poc a poc la inversió inicial.

 

El veïnat de La Balma comença a donar vida habitant l’espai, el dia 16 de Juliol.

 

Dins la comunitat de veïnes de La Balma, diverses persones havien participat d’altres experiències d’acollides o suport a persones en trànsit migratori: “érem disset unitats de convivència que des de llavors teníem clar que volíem que hi hagués un pis social, vam agafar-nos a la idea i la vam fer nostra, mai no hem deixat d’apostar per això”. L’Eva Ortigosa, coordinadora del projecte de Sostre Cívic, assegura que l’encara curt recorregut de l’habitatge cooperatiu fa que no es tinguin anys d’experiències, “estem desplegant el model i és la primera vegada que es fa una aposta en la vessant d’inclusió perquè un dels pisos sigui per persones que encara tenen més vulnerat el dret a un habitatge”.

 

Alternatives i possibilitats

El darrer 2020, només un 15’8% del jovent ha pogut emancipar-se de la llar familiar, sent la dada més baixa des de 1999, segons la darrera edició de l’Observatori d’Emancipació Juvenil fet pel Consell de la Joventut d’Espanya. 

L’aposta per l’habitatge cooperatiu, segons Rita Grané, una de les principals raons per apostar per l’habitatge cooperatiu és que aquest format permet els joves formar part d’una comunitat. “Molts dels joves extutelats tenen una xarxa social molt petita a causa del procés migratori i els anys de tutela, cal treballar en una nova xarxa relacional”, assegura la Rita. A més, afegeix “l’habitatge cooperatiu és un model transformador i no especulatiu, una eina interessant que mira de contribuir a transformar la societat”.

Tot i això, Grané reflexiona també sobre la necessitat de fer més inclusiu el model d’habitatge cooperatiu, “sovint no hi ha persones en situació de vulnerabilitat i creiem que amb La Balma obrim les portes a què esdevingui una alternativa més diversa, sortint de l’habitatge social i els edificis protegits, instant les administracions a invertir en un nou model”, continua. 

 

Acompanyament i replicabilitat

Des del Projecte Lliures es valora positivament aquesta iniciativa per dos motius. En primer lloc, asseguren que “demostra que existeixen mecanismes per garantir l’equitat en relació amb drets bàsics com l’accés a l’habitatge, alhora que posa sobre la taula el debat sobre quin model d’accés a l’habitatge volem”. D’altra banda, es posa en relleu com “la comunitat pot donar suport a persones en situacions de vulnerabilitat per, juntes, trencar les relacions de poder que es generen dins aquesta oferint noves oportunitats i nous mecanismes d’emancipació”.

L’Ali explica també que entre tot el veïnat van reflexionar sobre quin paper havien de tenir, “quan va aparèixer Punt de Referència vam entendre que no havíem de tutelar ningú, que senzillament érem veïns i veïnes, de ple dret i amb veu i vot, això ens va obrir un món i creiem que sortirà molt bé”, assegura. L’Abdel i en Nama ja participen de les assemblees i els grups de treball, i malgrat que el trasllat és molt recent, tot el veïnat està molt engrescat.

Tant la Rita com l’Eva plantegen futurs reptes pel que fa al model d’habitatge cooperatiu, “el primer repte és que els joves comencin a pensar i construir des de l’inici, entrenar-los, formar-los i fer-los conèixer aquest model. Segueix tenint sentit que hi hagi una entitat darrere, han de prendre decisions que no han pres mai i cal donar-los suport per entendre les decisions que han d’anar prenent”, comenta la Rita, que assegura que per futures iniciatives intentarien que els joves en formessin part des del principi. 

L’Eva confessa que “l’objectiu de l’habitatge cooperatiu és que esdevingui un model realment accessible per a totes les capes de la població” i assegura que des que van fer públic el cas de La Balma, han rebut moltes trucades d’entitats interessades però “continuem tenint un important repte econòmic de cara a assumir les inversions inicials”. Totes dues, però, destaquen el no assistencialisme de projectes comunitaris i la importància de la comunitat, i tenen molt clar que el model és replicable i que com més compromisos s’assumeixin, més places com aquesta es podran crear. D’altra banda, el retorn paulatí de la inversió inicial per part de l’Abdel i en Nama, permetrà construir models de rèplica també amb altres cooperatives i entitats que vulguin apostar-hi, en aquest sentit, la Rita destaca el compromís dels joves i també així ho viu en Nama: “el nostre objectiu és que n’hi hagi més”.

Tant l’Abdel com en Nama parlen de la comunitat com a part essencial d’aquest futur d’habitatge digne. Tot i això, també entre aquestes parets del primer pis del carrer Espronceda el vincle entre ells creix des que es van conèixer a Sant Feliu de Llobregat. “En Nama és com un germà”, diu l’Abdel assegut a la terrassa del quart. Dies després en Nama reia explicant el vincle que tenen; “l’Abdel és una persona de veritat, no puc dir res més”. Els dos joves han compartit un camí d’obstacles, aprenentatges, suport mutu i compromís que avui pren forma de balma. 

 

 

 

 

 

Cambios en el equipo profesional

Os animamos a conocer las personas que día a día, trabajamos en Punt de Referència: la junta y el equipo profesional.
Dando un paseo por la web descubriréis algunos cambios respecto al curso anterior, fruto de iniciar nuevos proyectos y del movimiento de altas y bajas en el equipo.

Damos la bienvenida a Bet y a Marina, dos técnicas que se han incorporado este final de agosto en el equipo de mentoría.
Les dos entran a formar parte del equipo técnico del proyecto Referentes. Bet llevará, para empezar, el primer grupo de Referentes de Mataró, y Marina estrena el proyecto Som Llavor, el proyecto de participación de jóvenes que tendrá lugar durante el primer trimestre de curso.

Despedida de Alba

Deseamos el mejor futuro a Alba, que cierra su etapa en Punt de Referència coincidiendo con el final de curso, para reorientar su camino profesional. Después de 5 años en la entidad, deja muy buenos recuerdos entre los jóvenes, las compañeras del equipo… te echaremos de menos!

Para continuar con el trabajo que Alba dedicaba al Proyecto Atenea, Mariona le toma el relevo a partir de ahora.

Alba nos ha escrito este texto, que encontramos bonito y que queremos compartir con vosotros.

 

 

Después de casi 5 años muy intensos, llenos de aprendizaje, se acaba mi etapa en Punt de Referència. Para mi, Punt ha sido una escuela, a nivel profesional por supuesto, pero también a nivel personal. A momentos, hemos sudado mucho, nuestro trabajo es, demasiadas veces, remar a contracorriente! Pero me quedo con muchos momentos que me han hecho muy feliz. Experiencias compartidas de aquellos que te llenan de energía, y vínculos creados que te demuestran que todo esto tiene sentido!

La verdad es que siempre me he encontrado una pequeña familia. Por un lado, he ido coincidiendo con diferentes compañeras con las cuales he aprendido mucho de su mirada hacia jóvenes, he compartido inquietudes sobre el acompañamiento, y con las que nos hemos acompañado también en lo que nos ocurría fuera de Punt. Creo que en Punt hay un equipo de profesionales que siempre trabaja dando lo mejor de él y con mucha excelencia! Me encanta y aprecio mucho que en Punt siempre se hacen las cosas con sentido, mirando que tengan el mayor impacto, y pensando y repensándolas cuando no tienen sentido o se poden mejorar. También he aprendido y me he empapado de todas las aportaciones de las personas con las que he coincidido o trabajando en red: las personas de la Junta de Punt, todo el voluntariado magnífico y entregado y los equipos educativos de los centros de los jóvenes. Por otro lado, una parte incondicional de esta familia son los jóvenes. Jóvenes que se lo merecen todo, y que me han mostrado todo el respeto y la estima que una profesional puede esperar. Es un regalo haber acompañado a tantos jóvenes, todos y todas con sus peculiaridades y sus trayectorias y maneras de afrontar la vida, que me han permitido conocer tantas realidades. Espero poder continuar viendo como van consiguiendo pequeños pasos para llegar donde se propongan!

 

 

Con estos cambios que os hemos contado, así queda el organigrama interno.  Preparadas para empezar!