Tag Archive for: nie

Torna l’esperança per a molts joves gràcies al canvi en el reglament d’Estrangeria.

 

Estem vivint un moment esperançador. Després d’un mes en vigor del decret que modifica el Reglament d’estrangeria, la situació d’alguns joves ja ha començat a canviar. Les resolucions favorables de les renovacions dels permisos de residència van notificant-se amb comptagotes, són els primers brots que ens indiquen que aviat la bona notícia arribarà per a més nois i noies.

El nou reglament, entre d’altres millores, concedeix als joves el permís de treball i facilita considerablement les condicions per poder renovar el permís de residència. Després d’anys de viure amb desesperació les dificultats de renovar el NIE, ara s’ha obert un món d’oportuntats i hi ha marge per somiar amb un futur millor. 

 

Algunes ja coneixeu en Youness. Conviu amb tres joves més a un dels nostres pisos assistits. Té acabats els estudis de Grau Mitjà en perruqueria i ara estudia primer de Grau Superior, també en perruqueria. Mentre gaudeix d’aprendre l’ofici, busca feina per poder-se emancipar. “Si trobo feina deixaré els estudis i els reprendré més endavant”. Ara que el Youness té el NIE renovat, trobar una feina serà més fàcil.

El mes de juny li havia caducat el permís de residència i encara que li havien explicat que el reglament d’estrangeria havia canviat, ell no confiava en el fet que la renovació fos favorable. No complia els requisits que se li demanaven amb el reglament anterior, i això el feia conviure amb la incertesa i els nervis.

“No sortia de casa. Pensava en coses negatives. M’imaginava el futur i pensava: em serà molt difícil continuar endavant. Sense documentació et sents molt estrany, sempre vas amb por, espantat per si et para la policia i no tens la documentació renovada. Estava espantat per la renovació, la meva família també patien amb la idea de tenir un fill indocumentat. La veritat és que hem patit.”

El patiment va acabar un dia que estava sol a casa. Com cada dia, va entrar al web desesperançat però aquesta vegada va llegir-hi la paraula “favorable”.

Vaig començar a plorar. Estava sol a la meva habitació. Vaig trucar a la Tere, vaig enviar un missatge al David, em fan felicitar. A la meva família quan els vaig dir que tenia resultat favorable també em van felicitar, em van dir coses boniques… aquest estiu m’agradaria poder baixar a veure’ls, fa 3 anys que no ens veiem.

El Youness s’ha tret un gran pes de sobre. Ara amb la documentació en regla diu “ha canviat tot: tinc l’oportunitat de treballar, podré arreglar la meva vida, podré anar a veure la meva família…ara només em falta trobar una feina”.

 

 

La Farah tenia una situació similar a la del Youness: des del mes d’agost que tenia el NIE caducat. En el seu cas els darrers mesos havia buscat feina a jornada completa per complir els requisits que li demanava l’anterior reglament. No en va trobar cap. El mes d’octubre va presentar la documentació per renovar el seu permís, coincidint amb el moment del canvi de llei d’estrangeria. Recentment se li ha retornat el permís, aquesta vegada favorable. La Farah era conscient que la resolució determinaria el seu present i futur.

“Estava preocupada i espantada per si el reglament no contemplava donar-me el permís de treball. Quan vam veure que si, em vaig alegrar molt. Ara puc buscar una feina pels caps de setmana mentre acabo els estudis i pràctiques la resta de dies de la setmana.”

Angustia pandémica, burocrática y laboral entre la juventud migrada

Técnicas de Punt de Referència coinciden en que una de las principales afectaciones de la crisis provocada por la pandemia en la juventud migrada es la imposibilidad de renovación de los permisos de residencia.

Sara Montesinos
Fotografías: Berta Roig

 

A principios del mes de marzo de 2021, poco antes del primer aniversario de la pandemia que se inicia con el confinamiento domiciliario, TV3 publicaba un reportaje sobre los efectos de la covid en la salud mental y emocional de los chicos y chicas. Después de un año en el que sólo habían ocupado titulares culpabilizándoles, los medios de comunicación han dado voz a las situaciones, consecuencia de todo lo que han sufrido. Según un estudio de la Confederación Estatal de Asociaciones de Estudiantes, el 72% de los estudiantes está más preocupado por su salud mental que por cualquier otra cosa. Además, el Centro de Estudios Sociológicos ha publicado recientemente un estudio sobre la salud mental de los españoles durante la pandemia, del cual se destaca que un 30% de jóvenes entre los 18 y los 24 años han tenido trastornos de ansiedad, el doble que la media de la población. Con esto, el Estado Español encabeza el ranking europeo de paro juvenil, con un 40’7% de la juventud parada. 

 

Y cómo ha afectado esta situación de pandemia a la juventud que migra sola? Coral Escobar, educadora social y tèécnica del proyecto de vivienda Pisos Asistidos, mantiene un contacto diario con los jóvenes del piso que acompaña. En este sentido, siendo una de las referentes principales, las relaciones estrechas que establece con ellos la permiten acompañarlos emocionalmente a lo largo del tiempo. “De la misma manera que a nosotros nos ha afectado esta situación a nivel emocional, a ellos también”, explica. “Yo les observo des de fuera y he valorado situaciones de más desánimo, de más sufrimiento, a veces no sé hasta qué punto se dan cuenta” La educadora no cree que sean casos aislados,  asegura que ha incrementado el aislamiento de muchos jóvenes así como la sensación ó de solitud, más que en épocas previas a la pandemia, “lo noto en conversaciones, comentarios, no tienen un ritmo relacional como el de antes, y no es algo que expresen directamente”.  Además, Coral comparte también reflexiones sobre los efectos del sistema de acogida de la administración, que ha hecho que muchos jóvenes hayan pasado por centros diversos en puntos geográficos diferentes. “han quedaado aislados en casa o en el barrio debido a las restricciones y a menudo tienen una red muy repartida en el territorio. 

 

Brahim siempre había soñado con vivir en Barcelona, desde que llegó en la Línea de la Concepción, Algeciras, ha pasado por diferentes ciudades como Sevilla y València, hasta allegar finalmente a la ciudad condal, donde procura arraigar des de 2017. Como a miles de jóvenes, esta situación de pandemia le ha afectado en el ámbito emocional, “ahora es complicado salir y también hacer deporte, eso hace que pase muchas horas en casa, le doy muchas vueltas a todo y me agobio, a veces necesito desconectar y no puedo con esta situación, explica en Brahim

Más allá de las relaciones sociales y la cura de los vínculos, Brahim se ha visto gravemente afectado per la crisis económica que ya comienza a dejarse notar. En su segundo año  de Grado Medio en mecánica había encontrado un trabajo con el que estaba contento y se sentía valorado, hasta había podido convalidar las prácticas con el trabajo, pero cuando llegó el final del contrato no se lo pudieron renovar. Unos meses más tarde, el verano del 2020, lo volvieron a llamar de la misma empresa, donde se reincorporó hasta principios de 2021, momento en el que se vuelve a quedar sin trabajo.  Mientrastanto, Brahim continúa encarando el Trabajo de Final de Grado y mirando de sacarse el carné de conducir con los ahorros que ha obtenido a lo largo de estos años. “He aprobado el examen teórico con solo un error”, dice sonriendo. Aún y así , las trabas burocráticas no se han aligerado ni con una pandemia mundial, y el próximo 23 de abril tiene que renovar su residencia con permiso de trabajo. La ley, pero, no lo permite sin un contrato laboral vigente, así que Brahim puede perder los papeles y tener que volver a empezar de zero si no lo consigue antes de Sant Jordi.

 

Alba Pi, técnica del Proyecto Atenea, es una de las referentes de Brahim. “Es un joven con una trayectoria muy buena, hace mucho que está vinculado a la entidad y siempre ha estado muy comprometido”, explica. “Él es muy modesto, pero saca muy buenas notas y los profesores lo tienen muy en cuenta de cara a las prácticas, compaginaba trabajo con estudios”. Alba comenta frustrada cómo la trayectoria de emancipación de Brahim, que iba muy bien, se ha visto rota por la situación de pandemia y la ley de extranjería, “Brahim ya trabajaba de lo que había estudiado mientras continuaba formándose, pero ahora sin un contrato se puede quedar sin documentación. Muchos jóvenes que se han quedado sin trabajo perderán los papeles, la situación es dramática”, afirma Alba.

Alícia Garcia, técnica de mentoría de Punt de Referència y acompañante de una veintena de jóvenes, explica también que una de las principales afectaciones son las relaciones sociales, “no sólo ha sido difícil que puedan salir y encotrarse con su red de amistades, sinó que para los jóvenes que no disponen de esta red ha sido imposible encontrar espacios de ocio donde crearla”. Otra de las graves consecuencias ha sido el acceso a una formación, ya que como dice la técnica de mentoría, “muchas son online y los jóvenes no disponen de recursos en casa para poder seguirlos. 

 

También Abdelkarim ha visto como su trayectoria formativa quedaba parada por la Covid19. Después  de cursos de mantenimiento, lampistería, cocina y soldadura, las prácticas del último curso quedaron suspendidas por el confinamiento. 

“Viví el confinamiento en un piso con cuatro jóvenes más, en aquellos meses aprendí a tocar el tambor”, explica antes de confesar que también se angustió mucho “algunos días estaba tan enfadado que pensaba en volver a Marruecos, pero después me doy cuenta que allí también tendría que empezar de cero, aquí he aprendido muchas cosas y no quiero volver. Ahora que vuelvo a hacer deporte ya no tengo ese pensamiento”.

La parada de las prácticas supuso también quedarse con menos posibilidades de conseguir un contrato de trabajo. Abdelkarim no tiene aún el permiso de trabajo y la reinterpretación de la ley de extranjería en materia de renovaciones imposibilita que pueda mantener su residencia. 

Tanto Coral como Alicia y Alba coinciden que lo que más preocupa a los jóvenes es el tema de la documentación que, a banda de la crisis de la pandemia, se junta con las denegaciones provocadas por el cambio en la ley de extranjería referente a las renovaciones de permisos de residencia. “Más allá de las regularizaciones de jóvenes migrantes solos, la situación ha hecho que muchas personas pierdan la residencia desde que empezó la crisis, haciendo mil pasos atrás i teniendo que volver a plantearse empezar otra vez”. comenta Coral.

“Hay también angustia entre jóvenes por el hecho de no recibir información directamente, nosotras estamos constantemente recibiendo noticias sobre la situación y ellos tienen muchas preguntas”, continúa Coral, según la técnica, muchos jóvenes se preguntan qué pasará o si habrá vacunas para todos. “Esta incertidumbre se suma al miedo por sus familias,  que viven en países donde la gestión de la pandemia es diferente, con más dificultades y preocupaciones que se agravan con la distancia”, dice Coral. Las tres técnicas afirman observar angustia en los jóvenes tanto por la pandemia en si misma, como por la situación de regularización y su futuro laboral.

Més traves legals pel futur del jovent migrant

La nova reinterpretació de la Llei d’Estrangeria dificulta la renovació de residència de centenars de joves. Aquest nou obstacle posa en perill no només la seva situació administrativa sinó també les seves orientacions formatives i professionals.

Sara Montesinos
Fotografies: Clàudia Frontino

 

 

Diu en Mourad que ho té tot planejat. És plenament conscient de les dificultats a les quals s’enfronta a causa de la Llei d’Estrangeria i per això contempla diverses opcions per continuar el seu camí a Catalunya. Als seus 19 anys, lidia de forma constant amb tràmits burocràtics, gestions de papers, serveis de protecció de l’administració i un llarg etcètera que altres joves a la seva edat ni tan sols imaginen.

Va arribar a l’Estat Espanyol l’any 2017, quan tenia només 15 anys, i des d’Almeria en un autobús cap a Barcelona. En Mourad, com milers d’altres joves marroquins, va marxar de la seva ciutat natal, Nador, per lluitar per una vida millor amb més oportunitats perseguint el somni europeu que arrossega frustracions, dolor i nàufrags.

“Vaig passar més d’un any al centre d’acollida de menors. Allà vaig aprendre a llegir i a escriure. Hi vaig estar molt bé i és una època que no oblidaré mai”, explica, “tenia un educador rifeny com jo, en Fouad. Amb ell vaig aprendre l’idioma, era molt bona persona i molt bon professor, amb ell em concentrava”. Tot i això després del centre de Vallvidrera va ser traslladat a un pis d’autonomia per a menors de Torre Baró. Allà va compartir pis amb quatre joves i més educadors, però ja no era el mateix i aviat va haver-se de preparar per a la majoria d’edat.

“Jo era un noi responsable, volia estudiar i em portava bé, però quan vaig fer els 18 anys tot se’m va desmuntar. Als 18 i tres mesos vaig sortir al carrer”, recorda.

En Mourad és un dels molts joves que va quedar al carrer poc després de fer la majoria d’edat, “ho vaig passar molt malament i vaig sentir que ho havia perdut tot”. Per sort, en la seva xarxa d’amics i coneguts va trobar sostre on passar-hi les nits i ara, a poc a poc, mira de tornar a estabilitzar la seva rutina. Tot i això, el malson burocràtic continua.

El passat mes de juliol, les entitats FEDAIA, ECAS i FEPA (que lidera la campanya “Un callejón sin salida”, de la qual en formem part) denunciaven en una nota de premsa l’enduriment dels criteris per renovar la residència per a joves majors de 18 anys. Per un canvi d’interpretació en la Llei d’Estrangeria, els joves extutelats no podran renovar els permisos de residència sense mitjans propis. 

El canvi afecta principalment en l’augment del percentatge de l’IPREM de què han de disposar els joves fins a 540€ en la primera renovació i fins a 2.100€ en la segona. L’enduriment, a més, no és només l’augment dels mitjans propis sinó que aquests no podran derivar-se del suport per a l’emancipació de què puguin beneficiar-se tant per entitats com per l’administració.

Aquest canvi, que es denuncia des de mitjans de 2020, comença a notar-se en aquest primer trimestre de 2021, en què les renovacions de residències de desenes i centenars de joves extutelats comencen a arribar denegades pel Govern de l’estat. D’altra banda, si la situació del jovent a Catalunya ja és complexa pel que fa a reptes laborals i emancipació, les exigències que la Llei d’Estrangeria fa al jovent migrant són desproporcionades i quasi impossibles d’assolir.

Segons el darrer estudi de Fotocasa, l’any 2019, l’edat mitja d’emancipació a l’Estat Espanyol era de 32 anys. En aquest sentit, i malgrat excepcions en pisos per a joves extutelats i prestacions que no tots assoleixen, s’exigeix al jovent que migra que autonomia i independència 14 anys abans del realment els joves, amb altres privilegis, poden assumir. A més, segons les darreres dades de l’Idescat, que daten de 2018 i a l’espera dels efectes de la crisi de la Covid19, el salari mig dels joves menors de 25 anys no arriba als mil euros mensuals nets. A tot això, cal sumar que el preu mig de lloguer a la ciutat de Barcelona és de 973€ mensuals i 737€ a Catalunya.

La nova interpretació de la Llei d’Estrangeria, més enllà de condemnar centenars de joves a la irregularitat administrativa, continua posant traves als seus projectes de vida. En el cas d’en Mourad, l’exemple més clar és la formació. Com molts altres joves, ell ha volgut ampliar els seus estudis. La situació en què va quedar després de sortir del centre li ha permès que així fos i no té previst deixar d’estudiar. Amb 19 anys, i sent la primera renovació des de la majoria d’edat, el suport econòmic que rep no li permetrà justificar mitjans propis.

“Abans era més fàcil, ara et fan decidir entre treballar o estudiar malgrat vulguem esforçar-nos a tenir una bona feina”, explica.

A més, el sotrac emocional que suposa la por a perdre el permís de residència afecta també el dia a dia i les rutines dels joves, “veig els amics patir moltíssim pels papers, i em sap molt de greu”, assegura en Mourad. Després de tota una trajectòria de centres i formacions, aquest nou obstacle burocràtic deixa en paper mullat la inversió de l’Administració.

En això, en Mourad ho té clar “hem après l’idioma, hem estudiat, volem seguir estudiant per treballar i aportar la nostra part al país i ara ens deixaran sense papers”.

Alba Pi, tècnica del Projecte Atenea de Punt de Referència on va ser educadora d’en Mourad, comparteix els neguits del jovent, “no saben què passarà i afrontar el dia a dia amb aquesta inseguretat genera moltes vivències d’inestabilitat, estrès i angoixa que dificulten seguir amb les seves trajectòries d’emancipació”. A més, l’Alba assegura que les professionals es troben que algunes de les persones que acompanyen, després de fer un esforç molt gran per aprendre la llengua amb un temps rècord i accedir a estudis superiors, amb l’amenaça de perdre la documentació estan deixant els estudis i perdent la possibilitat d’aprendre un ofici i trobar feines menys precàries.

 

Mentre diverses agrupacions d’entitats del tercer sector social com FEPA, Fedaia i ECAS demanen la revocació d’aquesta reinterpretació de la llei, joves com en Mourad continuen veient minvar el seu futur formatiu i professional. L’emancipació que per mitjana arriba als 32 anys, en el cas dels joves que migren sols esdevé una carrera plena d’obstacles quan de vegades ni tan sols han superat l’adolescència.

 

El jovent migrat, desesperançat pel nou reglament d’Estrangeria

Imagina que vas arribar a Barcelona fa 2 anys, sent menor d’edat i sense la teva família. Lluny del teu país d’origen vas començar una nova vida i, per fer-ho, vas necessitar suport. Vas viure un any en un centre de menors on vas conèixer alguns companys i on vas aprendre a entendre i després parlar català i castellà.

Mentrestant, gràcies a la teva persistència i de les teves educadores, per obtenir una cita a Estrangeria, vas aconseguir el permís de residència. Alguns companys del centre de menors no ho van aconseguir i ara són majors d’edat sense possibilitat de tramitar ni el permís de residència ni el permís de treball.

Ara ja ets major d’edat, has deixat el centre i has tingut sort: vius en un recurs d’habitatge on encara podràs estar uns mesos. Et cal treballar per mantenir-te a tu mateix, potser també a la teva família i, enmig d’aquests canvis, te n’adones que d’aquí a una setmana ja et toca renovar el teu NIE. Amb el nou reglament d’Estrangeria, només ho faràs si justifiques que disposes d’ingressos propis (que no provinguin d’ajudes socials ni públiques). Això significa que s’exigeix a joves que no tenen permís de treball uns ingressos de 540 euros al mes per a les primeres renovacions i més de 2.100 euros al mes per a les segones renovacions.

 

Aquesta és la història de molts dels joves a qui acompanyem, a qui se’ls ha denegat la renovació del NIE (després de 10 mesos esperant el veredicte) per no disposar d’aquests mitjans econòmics. En Moha (Projecte Referents) opina que no és un requisit lògic, el considera inhumà:

“M’han arribat a dir que demani els diners a la meva família, jo no hagués vingut a Barcelona si la meva família disposés d’aquests diners”.

“Estic esperant que ens diguin, almenys, per quins motius han pres aquesta decisió. Tampoc no entenc per què han invertit recursos en nosaltres, i ara que ens hem après l’idioma, ens hem format i integrat en el funcionament, ens deixen perdre. Una de dos: o ens ho expliquen amb un raonament lògic o que ens diguin que abandonem tota esperança.

Des de Punt de Referència estem treballant en xarxa per canviar aquest reglament, tan injust com demolidor pel jovent a qui atenem.

Una feina que ho és tot

 

Arribats a aquest punt el teu repte ara és trobar una feina que vingui acompanyada d’un contracte laboral a jornada completa i d’un any, és el requisit que es demana a les persones migrades perquè puguin obtenir el permís de treball. Tens habilitats parlant idiomes, tens coneixements d’informàtica i ganes de treballar en aquest àmbit, però veus molt lluny la possibilitat que et contractin sense experiència laboral prèvia i sense tenir una xarxa de persones del territori que t’hi puguin apropar.

Coneixes alguna oportunitat laboral? El talent jove està esperant la seva oportunitat. Al mateix temps, treballar és l’ única manera de continuar el seu procés d’emancipació. No dubtis en contactar-nos, com ha fet l’empresa d’inserció de persones en gestió de residus, Andròmines. L’empresa ha ofert 4 vacants de formació i contractació per a jovent tutelat i extutelat, subvencionades per la Generalitat. Jovent de Punt de Referència ha presentat la seva candidatura, i dues d’elles estan finalitzant el procés de selecció i aviat s’incorporaran a la nova feina.

“La nostra experiència de més de 27 anys treballant per la inserció sociolaboral de col·lectius en risc d’exclusió ens demostra que en el cas del col·lectiu de joves tutelats, quan es dóna un treball en xarxa real amb les seves persones de referència, quan tenen una adequada atenció i procés d’inserció, els resultats són molt positius i acostumen a ser tot un èxit. Qui pot pensar en un millor resultat del treball en xarxa que fer possible que aquests joves puguin tenir una oportunitat real a la societat d’avui dia?“
Núria Sau, directora d’Andròmines

 

Quins efectes té la llei d’estrangeria en el jovent migrat?

Fa uns dies llegíem al diari que gairebé 10.000 menors immigrants tutelats a Espanya no tenen documentació. Sortir dels centres amb 18 anys i sense el seu NIE suposarà per a tots aquests joves tenir el camí cap a l’emancipació molt més difícil: es trobaran en situació il·legal al territori, per tant no podran residir legalment al país i en el pitjor dels casos podrien ser deportats al seu país d’origen, tenint en compte que la majoria tampoc no tenen passaport. Vivint aquí i sense NIE no podran obtenir el permís de treball, tampoc no tindran accés a alguns espais formatius, ni podran obrir un compte bancari, o quelcom tan aparentment accessible com apuntar-se a un club esportiu.

Posant de punt de partida un cas com el descrit, comença pel jovent una cursa d’obstacles per aconseguir el NIE i el permís de treball: dos objectius que, depenent de si s’aconsegueixen o no, determinaran de manera rotunda les vides d’aquests nois i noies.

 

PRIMER OBJECTIU: NIE

Aconseguir una documentació que reconegui els joves serà la clau del seu futur, per aquest motiu és una de les prioritats a treballar per les educadores dels centres de menors i també per a les professionals de Punt de Referència. Les primeres traves, però, les troben en el moment de demanar cita a l’Administració que se n’encarrega: Estrangeria. Aconseguir una cita suposa un periple que pot durar setmanes i moltes vegades acaba sense èxit, i sense cita, no hi ha papers. Ens imaginem que haguéssim d’estar setmanes i setmanes intentant demanar cita per renovar el nostre passaport o el nostre NIE?

L’alegria és immensa quan un/a jove aconsegueix el NIE, però passat un any torna l’angoixa perquè toca demanar la renovació per la qual cal presentar una sèrie de documentació a vegades difícil de recopilar si no és amb ajuda de professionals, com per exemple, poder justificar que tenen mitjans econòmics per viure pel seu compte.

 

 

“És quasi impossible aconseguir els papers. És un procés massa llarg en el qual, per un motiu o altre, t’acaben negant la documentació”. Massa vegades escoltem aquesta frase en molts dels joves que acompanyem. Tot i que el resultat sigui positiu, no podem oblidar l’angoixa que pot generar l’espera d’un tràmit tan central en la seva trajectòria.

 

EL PERMÍS DE TREBALL
Amb el NIE a la mà, el jovent pot finalment accedir a una feina. Però no serà fàcil. El requisit perquè el/la jove aconsegueixi tenir el permís de treball és presentar un pre-contracte laboral d’un any de durada a jornada complerta, tot un repte tenint en compte que la seva experiència laboral i/o la seva formació prèvia és molt escassa degut a la seva edat, i a les dificultats d’obtenir aquest tipus de contracte al mercat laboral actual. Aquesta tramitació pot trigar, en el millor dels casos, entre 3 i 5 mesos a resoldre’s, uns mesos d’espera que es fan eterns per la persona que espera ser contractada i per l’empresari/a que ofereix el lloc de treball.

 

 

 

 

TREBALLO AQUÍ DES DE FA 9 ANYS, PERÒ NO PUC VOTAR.

Malgrat puguin haver passat anys per aconseguir el NIE i una feina, aquestes persones encara son lluny de ser ciutadans de ple dret fins que no aconsegueixin la nacionalitat espanyola. És el cas de molts joves que han passat per l’entitat i a qui hem seguit la pista. Porten 9 anys reconeguts legalment amb un NIE, amb una trajectòria d’estudis i de treball al territori però no són suficients encara per, per exemple, exercir el dret a vot.

 

UNA LLEI QUE POSA PALS A LES RODES
Aquest procés descrit és el més habitual entre el jovent migrat que atenem des de l’entitat, però cal tenir en compte que la Llei d’Estrangeria és encara més dura pel jovent que ha arribat amb la majoria d’edat feta o així li han determinat les proves d’edat. Aquest col·lectiu és el que pateix més per l’obtenció de la seva documentació.